Gracias a una serie de estímulos fiscales, el apoyo a la vivienda es una realidad y permite el beneficio de tener elevador en construcciones casa-habitación.
La apuesta de los gobiernos federales anteriores era brindar apoyo a la vivienda de interés social, con espacios muy reducidos y, la mayoría de las veces, disfuncionales.
Hoy, esto ha cambiado: la apuesta es por las viviendas verticales que, además, traen consigo una serie de incentivos económicos para las constructoras y para las familias, como el beneficio de tener elevador, espacios más amplios e incluso costos de mantenimiento mucho más bajos.
Fue a principios 2015 cuando el Gobierno de la República publicó en el Diario Oficial de la Federación una serie de beneficios fiscales a las empresas constructoras de vivienda a fin de que los costos no los trasladen a comprador final.
Condonación del IVA
A la par del fomento a la vivienda vertical, el gobierno decretó una serie de disposiciones enfocadas a otorgar un estímulo fiscal del 100 por ciento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) que se cause por los servicios parciales de construcción de vivienda, sea casas habitación o edificios de departamentos.
Esto se aplica con el fin de evitar que este impuesto impacte en un aumento del precio final.
Es decir, a partir de 2015, todos aquellos que sean proveedores para la construcción de viviendas no pagan IVA a fin de que este gravamen no repercuta en el precio de la casa construida, lo que representa ahorrar en construcción de tu casa o edificio residencial hasta 16 por ciento del costo total.
Para ser acreedor de estos beneficios se tienen que cumplir ciertos requisitos como el que los beneficiarios de la exención del impuesto tengan en regla los documentos y la propiedad esté a su nombre.
No es un secreto que uno de los detonantes de una economía local es el sector de la construcción, el cual genera cientos de miles de empleos al año en el país.
Crecimiento por las nubes
Estos estímulos forman parte de la estrategia integral para fomentar la vivienda vertical.
Hace dos años, el gobierno federal anunció un aumento de subsidios a la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) para la construcción de la vivienda vertical a menores tasas de interés.
Esto ya se tradujo en números: ciudades como Monterrey pasaron de vender 472 viviendas verticales en 2009 a 2 mil 71 en el 2016. En Guadalajara, apuestan a construir este año vivienda vertical cuyos precios oscilarán entre 280 mil y 450 mil pesos.
Ahorros a la vista
Gracias a las medidas fiscales y a la tendencia de erigir viviendas verticales, hoy puedes contar con el beneficio de instalar un elevador en tu edificio y promoverlo entre tus compradores e inquilinos como una forma de “ahorrar en mi casa”.
El beneficio es colectivo para los ocupantes de la vivienda vertical, pues casi todos los servicios son paquetes integrales, lo que repercute desde en los costos de construcción hasta en el pago de servicios.
No olvidemos que tendrás más flujo de efectivo en el transcurso de la obra. Sabemos que los gastos durante el proceso de construcción se incrementan y contar con ese flujo de efectivo al aplicar el decreto puede ayudarte a incrementar ese 16% para poder gastar en lo que necesites.
Aprovecha los incentivos que ofrece el gobierno federal en apoyo a la vivienda y eleva el valor, más no el precio, de tu vivienda.