Para agilizar el tráfico en los elevadores, y volver menos incómodos esos minutos de viaje, es conveniente que sepas cómo comportarte al entrar y salir y al estar dentro de ellos.

En edificios altos y en las horas pico, el movimiento en torno a los ascensores puede volverse caótico, por eso debes conocer algunas reglas de urbanidad sobre qué hacer dentro de un elevador y al abordar la cabina y descender.

Antes de subir

  • Una vez que hayas llamado al elevador, mantente al lado derecho de la puerta del mismo, así cumplirás con la primera regla de etiqueta: dejar espacio para que primero desciendan los usuarios que están dentro.
  • Evita usar el ascensor si solo vas a subir o bajar uno o dos pisos, a menos que tengas alguna limitación física. Además de que el ejercicio es benéfico para tu salud, les ahorrarás algunos minutos de retraso a otros usuarios que se desplazarán más niveles.
  • Asegúrate de que el elevador que se abre frente a ti va en la dirección correcta. Así no perderás tiempo acompañando a los demás en su recorrido antes de poder llegar a tu destino.
  • No intentes subir si ves que ya no hay espacio suficiente en el interior. Lo ideal es que se considere el espacio que ocuparían dos personas por cada usuario para que no queden demasiado juntos ni invadan el espacio personal de cada quien.
  • Un saludo general es lo cortésmente correcto.

Tras abordar

  • Lo correcto es que te sitúes lo más al fondo posible, pegado a las paredes y en las esquinas, de esta manera dejas espacio para las personas que suban detrás de ti o en pisos posteriores.
  • Si quedas junto al panel de botones, ten la amabilidad de preguntar el destino de quienes aborden y presionarlo. De esta manera le evitas tener que estirarse o empujar a otros para hacerlo.
  • Si aún hay espacio, sostén la puerta si ves venir apresuradamente a alguien que quiera abordar.
  • Evita las conversaciones incómodas o indiscretas. Si vas acompañado, hablen en voz baja si es necesario. Si estás a mitad de una conversación en el celular, haz una pausa y reanuda la llamada al llegar a tu destino.
  • Si te encuentras al frente de un elevador atestado y alguien detrás de ti necesita descender, sal de la cabina para permitírselo y luego aborda de nuevo.

Al descender

  • Si el elevador va lleno y estás ubicado al fondo, anuncia que bajarás cuando te vayas aproximando a tu destino.
  • No empujes al salir. Aplica tus buenos modales y di “con permiso”, “por favor” y “gracias” mientras te desplazas hacia la puerta.
  • Si llevas algún bolso o bulto voluminoso, mantenlo abajo y al frente de ti al caminar a la salida. Así molestarás menos a los otros usuarios, pues es a la altura de las piernas donde hay más espacio.

 

En ciudades donde son de uso común los elevadores (Torreón, Monterrey, Guadalajara, León, la Ciudad de México, entre muchas otras), está comprobado que la cortesía, ante todo, hace llevadero el tiempo que pasas dentro de un espacio tan reducido acompañado de extraños.

Aplica estas reglas de urbanidad cada vez que uses un elevador y notarás una diferencia en la agilización del tráfico y en el estado de ánimo y la actitud de los demás usuarios.

Cta Vilobox