En los edificios de oficinas, el común de los usuarios de los elevadores tiene prisa: por llegar a una cita, por ir a otro sitio; simplemente, por realizar el máximo de tareas durante una jornada laboral. De ahí la importancia de optimizar los tiempos de espera y de traslado entre un piso y otro.
Para los usuarios, tomar el ascensor es como andar en un autobús. Si quieren ir al centro, esperan hasta que llegue un autobús que vaya en esa dirección y luego suben en él. Al llegar a su parada, bajan. ¿Van hacia los suburbios? Aplica la misma idea.
Ese sistema funciona bien para los autobuses. Pero, como está descubriendo un creciente número de administradores de edificios comerciales, hay una forma mucho más eficiente de operar los elevadores, especialmente en los edificios de alta densidad de población.
Tecnología de vanguardia
Se llama despacho “basado en el destino”, o “hall-call“, que es una nueva tecnología diseñada para edificios con varios ascensores, la cual puede ser incluida en las nuevas construcciones o agregados a los equipos existentes durante las modernizaciones.
En la práctica, el despacho de destino acorta para los usuarios los tiempos de traslado al piso deseado en entre 20 y 30 por ciento, y resulta, además, en un desgaste significativamente menor en el equipo y en un manejo de más tráfico sin agregar ascensores.
¿Cómo opera?
Para los pasajeros, usar un sistema basado en el destino es más como subir a una limusina en vez de tomar un autobús.
En lugar de los botones “Arriba” o “Abajo” afuera de los elevadores, hay un panel que integra la operación de todos los ascensores y donde el usuario introduce el piso al que desea ir. Una pantalla LCD le muestra entonces qué ascensor utilizar.
Cuando llega el ascensor asignado, la persona simplemente sube y el elevador automáticamente le lleva al piso deseado; por lo general, en mucho menos tiempo y con menos paradas.
Mayor eficiencia
¿Por qué esto es más eficiente? Porque el sistema utiliza sofisticados algoritmos de software para averiguar la forma más directa y eficiente de responder a las demandas de tráfico momento a momento.
El sistema calcula continuamente la ruta óptima para cada ascensor (en función de dónde se encuentran los usuarios y hacia dónde se dirigen). Los sensores de peso en las cabinas, por ejemplo, pueden estimar el número de pasajeros que ya están a bordo para “decidir” si dejará a los pasajeros antes de recoger a otros nuevos, y en dónde.
La clave, por supuesto, es la eficiencia de los algoritmos de despacho. Los mejores algoritmos se han afinado y refinado a lo largo de varios años, basándose en la experiencia del mundo real en edificios reales. Es más arte que ciencia.
Beneficios importantes
En instalaciones bien diseñadas, los sistemas basados en el destino típicamente resultan en aproximadamente la mitad del número de paradas por piso que los sistemas convencionales.
Esto se traduce en un 50 por ciento menos desaceleraciones, aperturas y cierres de puertas, y aceleraciones por año, lo que marca una diferencia sustancial en los mantenimientos requeridos por los ascensores.
Esta mejora es especialmente adaptable a los sistemas de elevadores en México, donde hay muchos edificios antiguos que están sobrepoblados y no cuentan con ascensores suficientes.
Si necesitas trasladar a un mayor número de usuarios en menos tiempo, no es necesario que cambies de elevadores o incluyas nuevos. Simplemente modernízalos con un sistema de despacho basado en el destino y verás una notable mejora en el tráfico y grandes ahorros en tus cuentas de mantenimiento de los equipos.